LA REINA CAMILA DE GRAN BRETAÑA, POR SEGURIDAD Y PARA ESCAPAR DE LAS CRÍTICAS A LA MONARQUÍA, RENUNCIÓ A UN INGRESO DE 360 MIL LIBRAS.
La reina Camila, esposa del rey Carlos III de Gran Bretaña, renunció a una exorbitante cifra de dinero, unas 360 mil libras, por seguridad de la monarquía y para no ser criticada por el pueblo y porque está haciendo lo posible con habitantes de la monarquía.
Camilla Parker es una de las figuras de la corona británica más despreciadas por los ciudadanos junto a Carlos +III y, la reina hace todo lo posible para que su pueblo le tome cariño y eso la llevó a rechazar esa suma de dinero que cobraría como sueldo como lo hizo el duque de Edimburgo, esposo de la reina Isabel II.
Tras la coronación de Carlos III comenzó su reinado y con ello se modificaron varias conductas de la realeza británica y, entre las críticas por parte de quienes no quieren ser un país monárquico, es el gasto de la corona que se sostiene con impuestos.
Además, en la serie «The crown» se reflejaron conflictos en donde los asesores le explicaban a Isabel II que el gasto desmedido del Palacio de Buckingham estaba dando de qué hablar y podría dar una imagen negativa como institución. A pesar de ello, algunos de sus miembros acceden a sueldos que les corresponde por su trabajo.
Es por eso que la reina consorte, Camilla, quien puede recibir un sueldo de 360 mil libras decidió recharzar esa suma de dinero.
A modo de ejemplo, el duque de Edimburgo, esposo de la difunta reina Isabel II, uso ese ingreso al máximo y parte de su riqueza estaba respaldada por sus ciudadanos, pero la esposa de Carlos III decidió renunciar para no sumar escándalos.
La noticia fue difundida en un informe de la Oficina Nacional Auditora que investiga las finanzas de instituciones británicas y, desde la asunción del rey, los actos oficiales aumentaron y eso representa un aumento en el gasto, y ese es el motivo por el cual Camila decidió que sus apariciones pública sean financiadas por el Fondo Soberano.
En el último año fiscal, según difunden esas instituciones, el gasto público de la casa real británica fue de 117,3 millones de libras, de las cuales 107 millones corresponden al Gobierno que coordina aquel fondo.